La familia Rockefeller, junto a otros accionistas como el interventor de la ciudad de New York, han estado intentando que la empresa ExxonMobil agregue la no-discriminación a sus empleados LGBT dentro de su reglamento corporativo.
Sin embargo, la mayoría de los accionistas de la empresa no estuvo de acuerdo; votaron en contra de la inclusión de la "orientación sexual" e "identidad de género" al reglamento de no-discriminación de Exxon el pasado 28 de mayo. Fox Business News reportó que alrededor del 40 por ciento de los accionistas votaron a favor de la claúsula, lo cual no fue suficiente para la inclusión de la misma dentro del reglamento corporativo de la empresa.
Este mismo resultado se viene repitiendo desde hace ya ocho años. En el año 2000, el primer año en el que se propuso esta cláusula, la misma recibió solamente un 8.2 por ciento de apoyo de parte de los accionistas. El porcentaje ha ido creciendo con el correr de los años. Sin embargo, el organismo civil Human Rights Campaign señala a ExxonMobil como la única empresa en la que han tenido que presionar a los accionistas como una manera de llamar la atención de la compañía ante esta propuesta.
"Nuestras conversaciones con los ejecutivos de la empresa nunca llegaron a ningún lado", declaró el vocero de Human Rights Campaign, Trevor Thomas. Esto deja a ExxonMobil con la dudosa distinción de ser una de las pocas grandes corporaciones que no proveen protección a sus empleados LGBT.
Sin embargo, la mayoría de los accionistas de la empresa no estuvo de acuerdo; votaron en contra de la inclusión de la "orientación sexual" e "identidad de género" al reglamento de no-discriminación de Exxon el pasado 28 de mayo. Fox Business News reportó que alrededor del 40 por ciento de los accionistas votaron a favor de la claúsula, lo cual no fue suficiente para la inclusión de la misma dentro del reglamento corporativo de la empresa.
Este mismo resultado se viene repitiendo desde hace ya ocho años. En el año 2000, el primer año en el que se propuso esta cláusula, la misma recibió solamente un 8.2 por ciento de apoyo de parte de los accionistas. El porcentaje ha ido creciendo con el correr de los años. Sin embargo, el organismo civil Human Rights Campaign señala a ExxonMobil como la única empresa en la que han tenido que presionar a los accionistas como una manera de llamar la atención de la compañía ante esta propuesta.
"Nuestras conversaciones con los ejecutivos de la empresa nunca llegaron a ningún lado", declaró el vocero de Human Rights Campaign, Trevor Thomas. Esto deja a ExxonMobil con la dudosa distinción de ser una de las pocas grandes corporaciones que no proveen protección a sus empleados LGBT.